"No te me mueras. Voy a pintarte tu rostro en un relámpago tal como eres: dos ojos para ver lo visible y lo invisible,una nariz arcángel y una boca animal, y una sonrisa que me perdona, y algo sagrado y sin edad que vuela de tu frente,mujer, y me estremece, porque tu rostro es rostro del Espíritu.
Vienes y vas, y adoras al mar que te arrebata con su espuma, y te quedas inmóvil, oyendo que te llamo en el abismo de la noche, y me besas lo mismo que una ola.
Enigma fuiste. Enigma serás. No volarás conmigo.
Aquí, mujer, te dejo tu figura."
RETRATO DE MUJER
Gonzalo Rojas



lunes, 3 de enero de 2011

XII

Ellas descendieron del universo a mis brazos, habitando cuerpos esculpidos por la vida, dejaron en el viento sus alas batientes para permitirse latir en mi regazo.
Ellas son verbo en futuro, rebeldes ante la inercia, se transforman, crecen, se modelan. Proclaman la esperanza en la agudeza de sus preguntas, y sin esperar respuestas, crean y fundan los mañanas.
Ellas acuden a mi inocencia antigua desempolvando las gastadas pupilas, sólo para verlas expandirse en la existencia, ligeras de equipaje, ingrávidas, con el sólo impulso del destino avivándoles el cuerpo.
Ellas se van haciendo verso a verso, como un poema improvisado, se inscriben en mi historia como prosa consagrada y en sus ojos triunfa la metáfora del tiempo.

Ellas descendieron del universo a mis brazos, y desde mis brazos saltarán a inventar nuevos universos.